miércoles, 26 de abril de 2017

PARA SIEMPRE (Diario de Alhaurin El Faro de Vigo)

http://www.farodevigo.es/cartas/2017/04/30/persona-cuida/1670066.html
Que la suerte me libre de quien confío pues, de quien no confío me puedo cuidar yo solo.

En un mundo ideal esta frase carecería de sentido alguno: en uno, en el que la maldad, en cualquiera de sus manifestaciones no tuviese cabida. Soy plenamente consciente que esto es tan imposible como que Donal Trump se corte el flequillo o Jean-Marie Le Pen entienda el significado de la Marsellesa. A pesar de ello, puedo asegurar que ese mundo existe en personas frágiles, inocentes, carentes de cualquier necesidad de venganza. Lo sé porque yo comparto mi vida con uno de esos seres excepcionales, que como las más bellas flores necesitan de cuidados para no ser marchitados por su entorno. Mi hija es autista, y como muchos otros discapacitados psíquicos no han desarrollado estrategias para sobrevivir a pesar de que para ello tengan que perjudicar a otros. Es por ello que siempre dependerán de alguien que les proteja de una sociedad que está diseñada para que el más débil perezca.

Todo esto era tan evidente para mí como que en Eurovisión siempre ganan los mismos, hasta que recientemente me crucé en la calle con una vecina discapacitada psíquica que posee bastante autonomía. Hablando con ella me dijo: ¨ La persona que me cuida¨. Esas palabras me parecieron preciosas pronunciadas por ella. Porque al fin y al cabo, todos desearíamos tener la certeza que al menos existe una persona que se preocupa de nosotros de forma desinteresada. Pero al mismo tiempo esa frase era la clara evidencia de la dependencia; que en el caso de mi hija, se prolongará aún cuando yo no esté para sufrirla y a veces para disfrutarla. Ahora, me dicen que es como si se fuese a la universidad a una residencia ¡Qué ironía! Debo suponer que también irá de fiesta alguna noche, se enamorará de algún chico, tal vez cuando acabe la carrera llegue a realizar parte de sus sueños. E incluso, si es lo suficientemente valiente, decidirá traer un hijo a un mundo que no se lo merece. La realidad, es que estoy delante de esas primeras fotos en la que después de años se mantenía sentada en la playa a mi lado, y me pregunto si le he fallado, si no he llegado a ser la persona que la tenía que cuidar. Porque ahora lo tendrán que hacer otros por mí. Lo tendrán que hacer por las noches cuando alguno de sus habituales dolores o miedos le acechen aprovechándose de que yo ya no estaré ahí para protegerla, para cuidarla. Intento engañarme a mí mismo cada segundo del día en esta dolorosa cuenta atrás diciéndome que puede que sea algo temporal, que encontraré la forma de recuperar nuestro tiempo, de vivir eternamente para poderla cuidar siempre.


http://www.farodevigo.es/cartas/2017/04/30/persona-cuida/1670066.html

domingo, 23 de abril de 2017

LA GUERRA DEFINITIVA ( EL FARO DE VIGO )


http://www.farodevigo.es/cartas/2017/04/21/guerra-definitiva/1664179.html


      La última batalla que cualquier individuo debiera librar sería aquella que erradicases definitivamente la estupidez humana. Pero, por desgracia aún no nos hemos dado cuenta de que ningún depredador ha sido diseñado para ser feliz. Si alguna de esas casas de apuestas que proliferan como los champiñones cubriese la predicción de que nos extinguiremos antes de que aprendamos a convivir en un mundo relativamente justo en el que unos pocos no enardezcan a unos muchos contra otros muchos en base a intereses meramente personales, me haría multimillonario. A pesar de todo ello ya no tengo miedo a un holocausto nuclear, quizás porque durante mi infancia me he imaginado tantas veces ese escenario que ya ha formado parte de vida como el calor del verano o el antaño frío del invierno: la eterna amenaza nuclear en la que somos meros peones de una cuestión de glándulas seminales, como es el caso en Corea del Norte. Aún así parece ser que es algo que el pueblo americano necesita imperiosamente como elixir mágico frente a sus problemas: ganar. Ganar siempre; en cualquier ámbito, ya sea deportivo, financiero, tecnológico o militar. La cuestión es que en las guerras todos pierden. Es una lección dolorosa que no interiorizaron en Vietnam, Afganistán o Irak... Sin embargo, la última guerra que han librado en su propio país ha sido la de Secesión (1861-65). Sufrieron el ataque de Pearl Habor, a 4000km de Los Ángeles, y aún no lo han superado hoy en día.Una intentona desesperada del ejército nazi en la costa este de Estados Unidos con tres de los famosos submarinos U-boot. Esto quiere decir que desconocen lo que es ver como tus casas, tu trabajo, todo lo que quieres y necesitas desaparece bajo el ejército invasor. Por eso es tan fácil ver la guerra en la comodidad del sofá de casa mientras la sangre derramada en países lejanos engrasa los engranajes de las tan lucrativas empresas armamentísticas.


viernes, 21 de abril de 2017

LA VISPERA DE MAÑANA (EL FARO DE VIGO)

http://www.farodevigo.es/cartas/2017/04/24/maldito-dia-lluvia/1666113.html
    Un  maldito día lluvioso, así ocurrió, por culpa de un maldito día lluvioso conjurado con la vanidad de un conductor más preocupado por deslumbrar con un coche aparente que por el estado de unas ruedas: que ayer, le hubiesen agarrado a la superficie mojada del asfalto. Pero...eso fue ayer. Hoy, si es que existe un hoy para los muertos, sólo queda de mí: un cuerpo en un ataúd; las lágrimas de los míos; todo lo que quise hacer y no hice, y la fría soledad de un cementerio.
    ¡No puede ser! ¿Al final todo se reducía a esto?, a una caja de madera con tacto suave y acolchado. La verdad es que siempre me había parecido absurdo tanto dispendio para que los muertos no padeciesen de la espalda en la eternidad, sin embargo bajo la perspectiva del momento, y con ello me refiero a estar boca arriba y a oscuras, hacen que mi punto de vista haya variado notablemente. Sería absolutamente fastidioso el dolor de ciática durante una infinidad de años por culpa de ahorrar un poco más en el ¨Más Allá¨. El pánico se va apoderando de mí entre pensamientos disparatados fruto del nerviosismo. Intento comprobar si estoy enterrado por confusión golpeando con mis manos la tapa del ataúd con la esperanza de que esta sea la peor de las pesadillas. No consigo notar el impacto de los golpes en mis manos, ni su movimiento. Es lógico, me digo, deben estar dormidas por lo incomodo de la posición. Grito con todas mis fuerzas, y el único sonido que escucho es el de mis pensamientos. ¡Dios, estoy un poco muerto! ¡Muerto de verdad! ¿Y ahora qué? Me vienen a buscar, ¿o qué?, porque yo no consigo moverme. Y si vienen a por mí, ¿a dónde me llevarán? No he sido mala persona en vida, incluso cuando me han matado no he pronunciado ninguna blasfemia, ni le he deseado nada malo aquel chaval, a pesar de que nunca podré despedirme de mi mujer y mis hijas por culpa de la velocidad, por culpa de unas ruedas gastadas. 

miércoles, 12 de abril de 2017

EL PRECIO DE UN NIÑO ( EL FARO DE VIGO )

http://www.farodevigo.es/cartas/2017/04/17/precio-nino/1661715.html



            Siempre he estado convencido que hasta la persona más íntegra tiene un precio, un momento de desesperación, un día en el que las circunstancias le superan hasta hacerle olvidar sus principios más firmes. También estoy convencido de que existen individuos que después de años de intentar esculpir la realidad con el cincel de sus intereses se terminan creyendo sus propias mentiras, como cada día hace el Presidente Trump. Ya casi nos habíamos acostumbrado a sus delirios de mesías superándose en cada nueva agresión a los principios democráticos y a los derechos inalienables del ser humano. Pero…le ha faltado tiempo para aprovechar la imagen de unos niños muertos a manos de bombas químicas para lavar su imagen con la colaboración necesaria de su amigo el Presidente Putin, escenificando una represalia que le hiciese ganar el afecto perdido del pueblo americano, y así poder proseguir libremente con la colaboración entre esos dos ¨grandes líderes¨ que pretenden repartirse el mundo. Me pregunto ¿cómo es posible que el bueno Donald sufra tanto por los niños sirios y nada por los que separa de sus padres inmigrantes en Estados Unidos?